domingo, 19 de octubre de 2008

Carrera del CSIC

Por distintos motivos, llevo más de un mes sin escribir: he estado de vacaciones en Egipto, por lo que tengo pendiente poner las fotos y contar las miles de anécdotas que nos ha pasado (afortunadamente niguna de ellas tiene que ver con secuestros); estoy preparando la web-blog del Club Canicross Guadalajara; además estamos metidos de lleno en la organización del II Canicross de Humanes del próximo 9 de noviembre.

Pero la carrera de hoy tengo que contarla porque he disfrutado muchísimo. En contra de los que hacen muchos corredores, he aprovechado los meses de verano para entrenar intensamente debido a que tengo más tiempo libre que en invierno (llamémoslo jornada intensiva) con el objetivo de mejorar mis marcas en carreras populares. Hoy he conseguido bajar una de ellas.

Desde que me aficioné hace dos años al canicross y a las carreras populares, he estado corriendo las carreras de 10 km entorno a los 50 min., unas veces mejor y otras peor (esto también depende del día que tengas) pero empezaba a sufrir de cierta frustración al ver que no mejoraba mis tiempos. Tan sólo en una conseguí acercarme a los 48 min. y pico, pero tengo ciertas dudas sobre la rigurosidad en le medida de la distancia, ya que otros corredores que me acompañaban ese días también iban sorprendidos con la marca que estaban haciendo. Cómo me caracteriza cierta tozudez, decidí que tenía que bajar de los 45 min., intentándolo en varias ocasiones y quedándome siempre en los malditos 50 min. y desanimándome bastante.

Así que decidí que algo tenía cambiar en los entrenamiento, y sí esto seguía igual pensar en dedicarme a otra cosa. Pero el esfuerzo a dado sus frutos. Me he documentado leyendo libros, revistas y páginas web especializadas y adaptando los métodos de entrenamiento a mis capacidades físicas y posibilidades. Me ha sido de gran ayuda la prueba de esfuerzo que hice en abril en la obtuve mucha información sobre mis estado físico y mis posibilidades.

El resultado ha sido que he corrido los 10.000 m de la Carrera del CSIC en 45`12". No he bajado de 45 min, pero estoy muy feliz de haberlos acariciado.

Ahora os cuento la carrera, porque la elección no podía haber sido mejor. La salida ha sido en la calle Serrano de Madrid, en la puerta del Ramiro de Maeztu, mi colegio e Instituto en los que estudié, así que estaba corriendo "en casa". Recoger el dorsal en las "pistas de minibasquet", pasando primero por "El Magariños" y después por "La Nevera" ha sido para que los pelos se me pusieran como escarpias y un montón de recuerdos de la adolescencia me volvieran a mi cabeza. En aquellos años hubiera jurado por los Sex Pistols que jamás correría una carrera popular, je, je.

A pesar de haberme levantado a las 7 h de la mañana me encontraba descansado. Como estaba concienciado con la cita, ayer me acosté pronto incluso dejé una película a medias que terminaré de ver después de la siesta. Me costaba seguir la película porque no paraba de darle vueltas a la carrera y que no se me olvidara nada (comprobante de inscripción, justificante de pago, DNI, reloj, pulsómetro, etc.). Así que la paré y a la cama.

Encima el tiempo ha acompañado, no hacía calor y tampoco ha llovido, aunque había mucha humedad. El recorrido empezaba, como decía antes, en Serrano, nº 127 y se seguía por esta calle hasta casi la Puerta de Alcalá. Desde ahí se giraba hacia Recoletos, se subía por Pº de la Castellana hasta Alberto Alcocer, se pasaban las plazas de Rep. Dominicana, Rep. del Ecuador, Rep. del Salvador y Rep. Argentina. Se enfilaba de nuevo la calle Serrano para terminar el las instalaciones del CSIC. Hasta el km 4 iba 1 min por encima de la marca, normal teniendo en cuenta que habío sido casi todo cuesta abajo. Aflojé un poco, pasando el km 5 justo en 22´30". El Pº de la Castellana se me ha hecho muy largo, y después encima venía Alberto Alcocer con más cuesta arriba, me he agobiado un poco porque iba perdiendo la marca (1´) y las energías. Esto era el km 7 aproximadamente. Aprovechando la cuesta abajo de los últimos 2 kilómetros he recuperado y entrado en el tiempo esperado...de esta guisa (dorsal 3223):





Lo peor del recorrido, lo de siempre, que todas las carreras que hay por Madrid pasan por el Santiago Bernabeu, aunque esta vez iba tan centrado en la carrera que ni lo he visto. Como compensación, todo el entorno de la salida y la meta en el Ramiro de Maeztu: los espíritus de San Ramiro, de Garibaldi y de La Demencia parace que me han dado alas.
En cuanto a la bolsa del corredor, la bolsa en sí es una mochila de tela que está muy bien. El contenido yo lo dividiría en: el habitual, una barrita energética y una camiseta técnica; el "original", un bote de AUTAN, un ambientador para el baño y un CD de música clásica (Handel en mi caso). Sólo se me ocurren dos explicaciones: una que Gallaradón va a acercar el río a la Castellana, vendrá a acompañado de mosquitos y así tenemos ya el repelente para que no nos quejemos a la oganización el año que viene; otra, que los corredores populares tenemos mala fama en cuanto a nuestras necesidades fisiológicas se refiere. Del CD no encuentro explicación alguna.

Los compañeros de equipo en esta ocasión han sido Roberto y Julio. Jaime tenía dorsal pero un esguince de tobillo no le permite correr. Se ha quedado en casa y lo entiendo perfectamente porque se pasa mal estando allí sin poder correr. Un fuerte abrazo campeón, se te ha echado de menos. Para despedirnos el merecino desayuno de rigor: huevos, bacon, patatas, coca-cola y zumo.

Hasta la próxima.

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